Conscious Life...Barcelona 20 de septiembre

La vida es un estado de ánimo

Es un instante y es en cada instante.

Percibir la vida es seguir un camino, a través de tu cuerpo despierto, más allá de los sentidos.

Si haces esto, si entrenas tu cuerpo para empezar a creerle más a él que a aquello que percibes exclusivamente a través de tus sentidos[1]*, verás el mundo desde tu interior, pues estarás usando tu alma para sentir.

Sólo así vivirás más dentro que en la profundidad del aquí y el ahora. Tus células te darán más información, cada vez más, pues ésta dejará de quedar bloqueada por tus sentidos.

Vivir conscientemente es percibir y sentir el mundo en cada milímetro de tu cuerpo para que llegue a cada milímetro de tu ser.

Sólo entonces comprenderás que los sentidos funcionan desde dentro hacia fuera, impidiendo bloqueos, multiplicando la sensación de dicha.

Para que esto suceda sólo tienes que hacer un entrenamiento mínimo, una práctica consciente. Pues desde la unidad consciente de tu cuerpo, lo que se conoce como memoria muscular, percibirás todo con una nitidez absoluta y sin el retardo o distorsión que supone pensar lo que ves.

La consciencia se produce cuando de repente no existe el tiempo, desaparece el condicionamiento temporal y aparece la visión clara de todo.

Esto sucede únicamente cuando aplicas mucha energía en un espacio breve durante un tiempo limitado, se rompe la curva espacio-tiempo y trasciendes. Desde ahí llegas a un estado consciente.

Tres son los pasos:

-       -Concentración.

-       -Cultivo interior del chi.

-       -Focalización exterior en un punto.

Después viene lo que algunos místicos llamaron paraíso o nirvana, que consiste en una multiplicación del placer por la recreación de los sentidos de la realidad. Es el siguiente paso dentro del escalafón evolutivo, más allá del homo sapiens está el hombre consciente, como proyección del alma interior en cada acto y en cada gesto más allá de la habitual dinámica reactiva que produce acción-reacción. El hombre consciente genera acción-creación.

Por todo ello, pensar que la vida consciente es estar sencillamente más atento es tan erróneo como creer que la meditación es sólo una forma de relajación.

Tienes que hacer un entrenamiento consciente y descubrir todo el poder que eres capaz de generar. Ahora no lo tienes, pero sí lo puedes conseguir.

De esta forma, entendemos por vida consciente el uso del poder de tu mente después de que ésta sea entrenada.

Tienes que entrenar tu mente. Sólo desde ahí percibirás el potencial que puedes llegar a desplegar si logras ordenar las acciones básicas, los movimientos básicos estratégicos.

No importa lo que pienses, importa que el entrenamiento que tengas en tu mente te permita alcanzar aquello que deseas, desde tu poder interior.

Las aplicaciones de este programa que denominamos Conscious Life se desarrolla sobre todo en aquellas acciones que requieren exactitud, precisión, destreza y eficacia.

Es en la ejecución de estas acciones en las que la persona que se entrena conscientemente, que ha hecho lo que en la disciplina zen denominamos la práctica, se diferencia más claramente respecto a aquellos que han permanecido bloqueados en sus fluctuaciones mentales.

Tu mente puede llegar a ser el peor de tus enemigos, pero también puedes aprender a hacer de ella el mejor de tus aliados.

Por tanto, la consciencia, lejos de ser una definición abstracta, es entrenamiento.

Bienvenido a la vida consciente.

Bienvenido a la casa que hay en ti, a tu morada, a tu poder interior.

http://bit.ly/MiguelMochalesBarcelona

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[1] * existen cinco sentidos y en oriente hay un sexto, un sentido para percibir los patrones abstractos o pensamiento

#cambiarelmundoescambiarlaformadeverelmundo