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Miguel Mochales

Miguel Mochales

martes, 22 de febrero de 2011

Mi camino a Miyu. Cuestión de honor.

Esta vida tener hijos no tiene nada que ver con el amor.

Y es mas, no debes confundir el amor con el alquiler temporal del un CARIÑO INTERESADO.

JAMÁS DEBE SER ASI.

Tener un hijo es una cuestión de honor.

Honor es toda la enseñanza principal que debe tener.

Honor que le tiene que inculcar el padre a través de lo que se denomina la hombría de bien cuyo principal exponente tiene que ver con la forma y consideración de los códigos de comportamiento que sean inculcados.

En un dojo zen tres son los valores.

HONOR, CONSCIENCIA. COMPASIÓN.

Explicarlo pertenece a otra entrada.

Un hijo es siempre para el progenitor una cuestión de honor, debe tener en el honor que trasmita a su hijo/a el único baluarte, pues lo demás siempre puede ser aprendido.

Jamás, debe ser un capricho y sobre todo debes entender que un día te niegue servirá para que ese primer día el, se empiece a afirmar como ser libre, es decir, como un libre pensador.

Criterio, caracter, capacidad de permanecer en un silencio consciente, amor en libertad, es decir compasión, serán, entre otras, las asignaturas que continuamente deberán darse en ese curso que llamamos ser progenitor.

Las restantes disciplinas son honor, poética y dignidad.

Después de esto, pocas cosas mas nadie te pueden enseñar.

No hay mas nada.

A todos aquellos que hacen de sus hijos pequeños tiranos, seres miserables y por encima de todos personajes débiles de alma, mi mas inmisericorde repudio.

...no le busques sentido, no lo tiene, o no. MMmz.

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