Arrancame los nudos de la garganta al decir tu nombre.
Te oro y me precipito en un vacío congénito de romanticismo.
Pero seré fuerte y no oiré a Luis Miguel, ni leeré a Buda, ni golpeare a ese primer idiota con el que me cruce ni daré una patada a la bolsa de basura.
Nadie tiene la culpa de que no me ames
Buda en el dojo tiene en este monje maneras rudas de decir tu nombre hasta que mi garganta se desnuda.
Eres tan elegante que duele que la tarde sea bonita si tu no estas.
Pd: Luis Miguel no pero ando a tientas con Aleiandro Fernández.
Don't follow my way. I wouldn't Mmmz
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