- Ha cambiado tanto todo porque todo es mi cuerpo.
- Un lugar de templo de alma en silencio ocluso.
- De lo salvaje aisló es sentimiento mismo de la fertilidad de mi mente.
- Y mi cuerpo limpio de alma de ayer no haya delincuente en deseo sino eterno abismo en placer de una meditación en silencio interior en el temblor de mi dojo en atardecer.
- Y es que el invierno pasa
- Por la mañana antes de que los pájaros canten se levanta mi alma.
- Desnuda de un ayer que invoca en alocada carrera mira mi vida y llora poesía en silencio. Del amar el amante mata este tiempo.
- Y al alba lanza destellos como improperios poéticos de amor vuelto en piel de viento.
- Así no llueve más ni alcanza en la tarde la mañana pues el día viene y mi amor sin mí se pasa.
...no le busques sentido, no lo tiene, o no. Miguel Mochales. Maestro zen.
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