- No mantengo mi yo.
- Sin yo te digo.
- No mantengo mi yo.
- Y desde perder mi yo, te grito con silencios.
- Son los silencios los que más grito.
- Mis silencios son palabras del infinito que cuando te las grito suenan a conflicto.
- Me he perdido de mi para un día salir a pasear y descubrí que estaba a tu lado.
- Ya no me queda tiempo.
- Se me acaba
- Conflicto es un tiempo que crece en una eternidad.
- Así vamos lentamente acercándonos a ver lo absoluto en cada instante.
- Y en ese absoluto caminaras lentamente el tiempo de la vida.
- Ahora quiero llamarte a dentro
- Dentro de ti.
- Dentro de algo que vas hacer que el cambio sean gritos como sonidos ausentes de fe.
- Por eso el conflicto no necesita de la fe.
- No te necesita a ti. El conflicto solo necesita un dios herido que quiere morder.
- Morder el cuello de alguien que necesita hablar para ver.
Así va mi conflicto y ya no veo.
....no le busques sentido, no lo tiene, o no. Miguel Mochales, maestro zen
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