El
Vuelo
de
los
Labios
del
Beso
de
Morfeo.
Introducción.
Poner una introducción a algo tan raro se me hace difícil, a la vez que quizás, en este caso, me sea totalmente necesario.
Lo mas importante que debo entender y debo a su vez expresarte, es el hecho de que los libros surgen por si mismos.
Es necesario dejarlos crecer y tu ser solo un materializador de aquello que se sucede.
Cada libro tiene vida propia, pero de una manera muy sutil, todos se encaminan en una sola línea o dirección.
El libro tiene de raro hasta su origen.
Es el legado de las largas tardes en una línea de autobús.
Toda su poesía se ciñe a la mirada, de vez en cuando, a la ventana que tiñe de colores dispares un cuadro variable.
Es raro en el titulo.
Pero su rareza describe en su mayor medida su esencia.
El origen es la búsqueda de los espacios de la reprogramación de la mente.
Es una búsqueda de un sistema que permita la superación de los bloqueos típicos de los estados de competencia.
Los estados de competencia son aquellos donde en un rendimiento de excelencia surge el bloqueo por la propia presión de un elemento vecinal conjunto que determina lo que hacemos.
Y no solo determina lo que hacemos, determina también el como lo hacemos, e incluso su superación, condiciona posteriores resultados.
Este sistema entra dentro del descubrimiento de una técnica que se denomina Meditación Intuitiva Asistida.
Meditación porque refleja los estados de ausencia que te permiten ser testigo de tu propia actuación.
Intuitiva porque es este elemento el diseño que sigue el tratador de la secuencia de reflexión.
Asistida porque es una actuación llevada por parte de tu preparador.
El titulo expresa esos estados previos a la situación onírica.
En los momentos donde Morfeo, dios del sueño, te besa en su dulce tiento. En esos instantes previos donde te embriagas de tus propios sentimientos, se abre por unos sutiles instantes la base de tu vulnerabilidad, al ser posible mediante la técnica anteriormente descrita la posibilidad de lograr que los bloqueos de una programación, no lo suficientemente buena, ha dejado.
Pero en la confección de este entramado yo también me deje embriagar por ese sentimiento de total vulnerabilidad.
En ellos la mente abandonada a su camino, deambulo mediante esta técnica por los paisajes de mis sueños, que como recuerdos trascendidos me hicieron superar las tardes en un autobús de línea.
Bienvenido al viaje de un sueño que en pocas paginas se volvió realidad.
Has llegado hasta aquí.
Si has abierto una pagina, es porque en algún modo o manera ya estabas.
¿Buscas?
Es normal.
Todos buscamos.
quizás lo que ni tú ni yo sepamos es que es el autor el que busca tu lectura.
Necesito que me leas.
De no ser así, estaría como tu estas ahora, en una continua búsqueda.
Tao.
Tao es el camino que todos emprendemos.
Peregrino.
Todo peregrinar es la necesidad de ese camino, porque en ese camino esta la búsqueda.
Y como explicarte ese profundo pozo de angustia que sientes en las tripas cuando respiras y no te llega el aire.
Entonces eres ya el verdadero peregrino.
Por el vacío de tu búsqueda te haces caminante.
Trashumas con tu petate de pensamiento que como los pétalos de la flor que caen desdibujan en su planear hasta el suelo el absurdo vacío momentáneo de la belleza.
Y todo en un segundo.
Y todo en un momento
Porque el camino son los momentos que mutan locos de un modo natural a contratiempo.
No, tú no eres de esos estupidos que se hacen al camino por moda.
De los que cada día limpian su bien pertrechada indumentaria.
En tu vestimenta hay polvo y suciedad.
¡Estas vivo!
Por eso manchas de tu exultante vida lo que te rodea.
Eres un trabajador manual de tu vida, un artesano.
Lejos de la estandarización de los demás, en esta noche estrellada hace frío, aun así, has preferido dormir fuera.
No has querido refugiarte.
No has querido ahormar tu mirada.
Aun en sueños veo tu orgullo herido.
Pero como es de noche duerme, que de sueños y su proceso trata este libro.
Si
Vengo a buscarte.
Ya sabes, aquí soy yo quien elijo.
Soy yo quien decido quien abre mis páginas.
Y a ti, te he elegido.
De sobra sabes porque.
Venga no seas vago.
Haz las maletas de la nada y ven conmigo, no podemos demorar más la partida.
Antes que el invierno de tu alma hiele estos paramos, en pleno mes de mayo hemos salido.
Solo faltas tu.
Recoge que ya algunos están de camino.
Yo hoy me quedado a esperarte, a que abrieras mis paginas, a que modelaras lentamente mis palabras en tus labios, a que estuvieras dispuesto, pues ya el tiempo se nos escapa y vamos a contratiempo.
Vamos aligera sino necesitas nada.
¡Ya!
Cierra los ojos.
Respira.
Camina e inicia el vuelo de la cometa de tu mirada tendida desde el cielo por los campos del antaño de tu vida.
Camina que yo en ti te observo.
Camina tú y el viento.
Dios.
dios esta en tu interior porque dios es tu interior.
Padre nuestro...
¿Cuántas veces rezas?
Casi siempre cuando se te rompen los adentros.
No te escondas, sino fuera por esos momentos nunca llamarías arriba.
Pero no pienses que eres tu quien llamas.
Son ellos los que se valen de tu angustia para que vayas a buscarlos.
Son como yo con mi libro.
Los dos te estábamos buscando.
Probablemente si me has elegido a mi no tengas tanta angustia en tu estomago. Pero los dos nos servimos de la misma treta.
Somos culpables del aire que buscas y ni siquiera sabes como respirar.
La vida de la certidumbre es el reverso de la angustia. Que como una moneda ingrávida lanzada al aire, se torna tantas veces como quiere de la cara a la cruz.
Si optas por mi libro no reces, PECA.
Se activista del desacato a lo normal.
Dale donde mas le duele, no siendo uno más.
No pienses, se consciente.
El tao del peregrino es la vía de la conciencia.
Tu senda.
Tao es la explicación de todo donde no hay nada.
Tú eres tanto que no eres nada.
No eres nada, es ser algo que no puedes comprar.
Algo que no llegas a medir.
Algo que solamente ves cuando cierras los ojos.
Es interior en algo que es algo, algo de ti.
Algo de mi.
Algo de todos donde todo esta inmerso en un bello sueño que llamamos vida.
Hoy he llamado a mi durmiente vida, quizás por eso dude un poco de la vida y prefiera creer en ella.
El tao en el exterior es el camino, el devenir.
El discurso, un discurrir, un caminar, un circular, un fluir, un gotear, un vibrar, un manar... si todo eso es, pero fuera.
El tao del interior es ese momento donde comprendes las cosas mas allá de solamente saberlas.
Es el momento que entiendes habiendo estado físicamente allí.
De pronto todo lo que has leído, cobra un sentido, ese sentido que armoniza todo.
Un pequeño chisporrotazo que ilumina toda la estancia pero que en tu interior dura toda la vida porque en ese momento se te ha perdido la mirada.
Si es cuando miras como si no estuvieras.
Y no estas porque en cualquier momento aprovechas para viajar al interior de las cosas que te rodean.
El resto de caminos eran solo caminos para alcanzar el sentido ultimo de las cosas.
Y es que en ese momento notas que todas las cosas se dan la mano para estar conectas.
El Tao se simboliza por un camino y una cabeza.
Prueba a caminar.
Si. Levántate y deja de leer.
¡Hazlo! Te espero.....................
......................................... ya has vuelto.
Si caminas en meditación estas en la tranquilidad del tao.
Si caminas ausente, alejado, omitido. No estas caminando en este mundo.
Pues ese caminar toca el vacío.
Ahora te dejo.
Camina como si los pies no importaran, estas de paseo en la vida, y la vida esta tan alejada que te permites los pasos del tiempo de la ausencia.
Estamos en el momento donde tu mente descanso tanto en ti que no molesta.
Estamos solamente tu y yo en un universo que es la sombra que el sol de la tarde en ti proyectas.
Antes de ser secuestrado del paraíso, mantén en ese itinerario el pensamiento de labios en vuelo metafórico de carnosas alas al mundo despierto y consciente de los sueños.
¡No! No pienses, ya veras como todo cobra sentido.
Que lo que lees en el exterior llene tu alma de luz y de sentido.
La puerta de la muerte y la vida.
Todo es muerte, gracias a...
Todo es muerte porque todo es vida.
Todo es chi.
Si no distingues es chi.
Pero si por cualquier cosa necesitas afianzar la vida solamente puedes llegar a la dimensión de ella por su opuesto que es la muerte.
Estos días de verano la gente se mata.
Viven tan alocados en un estado de inmadura inconsciencia que mueren como chinches.
Que estupido es que cuando vamos a celebrar el calor y la vida nos matemos.
La mortalidad en la carretera es algo que necesita ser solucionado y para ello las autoridades competentes en un súbito arrebato de mística, llegan a la vida a base de poner los muertos que se llevan.
Y es que la muerte llama a la vida y parece que la vida solamente lleva a la tontería.
Se contrapresta un extremo por el peso del otro.
Ahora necesito de ti.
Recuerda que yo te elegí para que me leyeras.
Por eso necesito de ti.
Necesito que sueltes los que este haciendo en tu cabeza y sueñes conmigo.
La vida se compone de pequeñas muertes que se pierden en el trasfondo de la gran muerte.
Se disuelven como un azucarcillo en agua, aunque a veces su sabor resulte amargo.
Por eso debes preparar tu muerte entrando en el continuo estado de ausencia del cuerpo.
Se ausente y no mente, no seas pensamiento para ser consciente.
En el vuelo de ese sueño del desapego. En ese momento que dices: hágase en mi según tu palabra-. En el momento crucial que esperas que no esperas nada, en ese mismo puñetero momento, toda mi sexualidad mana.
Joder, era ahí donde estaba.
Roto por dentro mi ego, este tapaba todo mi cuerpo en unas frases que daban sentido a la ausencia de mi en mi cuerpo cuando no estaba en pleno éxtasis.
Si limpias de apego.
Si vuelves a ver al sexo sin connotaciones. Se produce.
¡Si! Se produce.
Es mi reencuentro.
Y volvere a nacer...
allá donde el alma se queda.
En la parte de mi, que en mi partida, como fin permanezca.
En ella y por ella.
Volveré a nacer.
Si tocara diluirme en un mar, mi soplo seria el pensamiento, y siendo así después de que muera volveré a ti.
Volveré a nacer como ahora lo hago después de esta muerte.
Porque aquello que queda, borrado en el viento, de los sueños que lleva, solo palabras, vagos pensamientos que mi cuerpo de botella de naufrago alberga.
La vida es un cisne negro.
Un raro milagro.
Por eso no se como definir tu existencia.
Sutil
Quiero que seas sutil.
Quiero que seas tan tenue como el beso que das al aire después de acariciar la nada y piensas que aun estas tocando a ella.
Los pensamientos no se pueden esconder cuando son tendencias.
Tu cuerpo que respira, no se puede diluir en el viento cuando esta lleno de otra presencia.
Y es que todo ello son estados alterado de presencia, de tu estar, y por tanto de tus niveles de conciencia.
¿Quieres meditar?
Yo no.
Si quieres meditar, vamos a meditar. Pero yo no quiero.
Es mas ni siquiera creo que sea conveniente. Que te sea conveniente.
Quieres meditar, es correcto, pero quizás no sea el momento.
Tu momento no es este.
No así.
Meditar desde el vacío que es desolación es una funesta operación de graves consecuencia.
Antes de empezar debes arreglar tu vida pagando las deudas del alma.
Si esa que esta tan dolida.
Esa que te ha hecho abrir estas paginas.
Esa que ya no camina.
¡Corre! Ves y paga.
Yo te espero.
La rosa y la rupia.
Conmovido.
Trasladado en mi interior fuera de mi,
He permanecido tan perdido como lo estuve hasta que oí tu sonido.
Una de las semejanzas mas hermosas que te pueda contar, es la historia de la rosa y la rupia.
El dilema entre el dinero y lo bello.
Entre lo permanente y lo etéreo.
Entre lo útil y lo sutil.
La rosa como si misma se define en el minuto de su belleza.
Un parangón que en su brevedad alcanza los tintes de las gotas eternas.
Por eso la miran, por eso se alejan, por efímero no se acepta como moneda de cambio en la vida.
Por eso el hombre creo la rupia, para pretender comprar la rosa. Trocar por dinero los instantes de belleza.
Las cuotas de los precios cuando no encontró un campo donde aislada hermosa ella creciera dentro de la inutilidad de adornar un tiempo breve de breve belleza.
Por eso con la caída de sus pétalos yo quiero envolver en su desnudez el sentido de mi vida que cobro en ella los tintes de eternidad de ausencia.
Porque cuando estuve en ti este mundo se quedo pequeño.
Porque en ella todo permaneció escondido de la dramática presencia de un tiempo que pasa y que ahora inamovible queda.
Solo desde la plenitud.
Ese es el único lugar.
Si ya has ido a saldar las deudas de tu pasado.
Si te has aliviado del morral de tu vivir.
Ahora, como el caminante del poeta, podemos emprender el viaje.
Yo también, YA HE PAGADO.
Lo primero el cuerpo.
A todos de los que se empeñan en taparlo, menospreciarlo, infravalorarlo, usar y abusar del, tirarlo por el suelo.
A todos los perseguidores o abusadores de el.
Pues solo el aprecio del mismo parte del conocimiento de el.
Y el conocimiento se cimienta en la practica de la búsqueda interna de lo externo y viceversa.
A todos ellos por la enorme distorsión que nos han hecho creer de aquello que tenemos mas cercano, y a nuestra ingenuidad por no atrevernos simplemente a mirar hacia abajo.
¿Quieres meditar?
Solo tenias que mirar para abajo.
La meditación no es una potencia de la mente.
La mente ni siquiera es.
La mente ¿Dónde quieres buscarla?
Mírate, no la ves.
Mírate y sin embargo ves.
La mente no esta, es.
La mente es un cuerpo.
La mente son unas estructuras creadas para poder percibir el marco que nos rodea.
Estas viéndote, pero la mente es mas.
Estas oyéndote, pero la mente es mas.
Estas oliéndote, pero la mente es mas
Estas tocándote, pero la mente es ahí donde esta.
La mente siempre se halla en una acción reflexiva, hasta en la construcción correcta del lenguaje suyo propio.
La mente eres tu y tu eres tu cuerpo.
La mente actúa en una acción de percepción de lo que tu cuerpo siente y precisa.
Siente por influencia externa y precisa por influjo interno.
La mente desarrolla el pensamiento.
Pienso que veo. Pienso que huelo. Pienso que....
Estamos hablando de cadáveres de sensaciones.
Cadáveres que han sido regulados para no hacernos daño, en una tutelanza mal o bien intencionada.
Cadáveres de un presentimiento que anulan la verdadera constatación de lo que percibimos.
Cierra los ojos.
¿Qué ves?
Tapate los oídos
¿Qué oyes?
Cuando a cada uno de los sentidos respondas nada, en ese preciso instante, te hayas por el buen camino.
Es el momento en que logras apartar al personaje que te dice lo que sientes.
Una vez descubierto, échalo.
Pero no olvides a uno de los principales culpables, el sentido interno llamado pensamiento.
Cuando estés limpio de todos ellos, solo en ese instante aparecerá el universo.
Será como cuando alguien le operan la vista en una película y de pronto al quitarle la venda recibe una bofetada de luz.
Poco a poco todo ira adquiriendo forma.
Embotado en tus sentidos el mundo se te manifiesta, pero aguarda, no te muevas, disfruta un instante conmigo. En la próxima pagina te diremos como lograrlo, ahora solo mantén un silencio ausente. Se solo un testigo.
El control de los sentidos. Aprendiendo a meditar.
Controlar los sentidos es ponerlos en su sitio.
El sitio eres siempre tu.
Tu estas donde estas, el tiempo, el espacio son siempre creados por ti, son tus espacios, son tus medidas.
El espacio y el tiempo es siempre el marco de la medida de tus sentidos, es tu intimidad.
Esa intimidad es el ámbito que tu tienes para tu defensa, para tu protección.
Es en ese campo que te rodea, donde creas un campo de energía a través de tu chi.
Ese campo es llamado aura, pero realmente es una expresión de tu chi y de tus sentidos, por eso se le llama alma.
Meditar es entrar en ese alma.
Entrar en ella en silencio.
Es como cuando estas en la cama tapado hasta arriba.
¿Te acuerdas de una sensación de mayor protección?
Y entonces solo permanecías, estabas allí en un estado de silencio. En ese estado solo era una expansión del chi dentro de un campo que considerabas cómodo, tuyo y sobre todo protector.
Meditar es entrar en el espacio que es tuyo, nada mas.
No te es extraño, no te es ajeno, es tuyo. Por eso esta ahí.
En la burbuja del alma la tienes que extender alrededor de aquello por donde te mueves.
El camino, la parada, todo se tiene que producir con la compañía de ese estado de conciencia.
Es como si te hubieras vestido con un traje de sensibilidad en tu cuerpo.
Ahora no solo sientes con tus sentidos, tu piel es un borbotón de los mismos corriendo de arriba abajo.
Y todo ello dentro de la medida de tu cuerpo que proyecta todo su estado en silencio.
Meditar es permanecer ahí.
Tu cuerpo, permaneciendo en vigilia, se mantiene en calma para que puedas entender ese campo de fuerza.
Esa meditación es el primer ensayo, un pleno ensayo de conciencia.
Pero luego caminas.
En ese momento no trates de mirar mas allá de ti.
Si eres capaz de levantarte y llevar contigo ese campo de energía, entonces serás capaz de meditar en el camino.
Ese meditar en el camino es tu propio Tao.
Si haces esto, todo será el reflejo de tu sentido. Y en el camino por propia inflexión del campo en ti ese sentido del camino te dará el sentido de tu vida.
Sentido porque sientes.
Emociones porque llegan.
En su pasar solo queda la intemporalidad y la irrealidad de ella.
Solo ese es el sentido.
Consciente de lo que eres y de lo que no eres y del final del silencio.
Medita.
Entra en tu espacio.
Silencio... tu vida solo llega en el camino de la conciencia de la senda de la mirada.
El primer paso.
Ese es el caminar.
El caminar es solo un paso.
Si descompones como caminas, te das cuenta que solo hablamos de un paso.
El paso sorprende por su sencillez.
Pero en el siempre hablamos del punto angular donde se desarrolla el camino.
Sin su simpleza no seria posible su ejecución.
Su propia humildad, en ella, radica su magnifica eficacia.
¿Por que n decidirnos a caminar?
Tan sencillo como el muro de silencio que se levanta entre tu y tu interior.
Cuando te separas de tu cuerpo.
Cuando tu mente se adelanta a otro espacio y otro tiempo.
En ese mismo instante pierdes el paso.
Al principio solo se produce un tropezón.
Pero cuando te detienes es en ese momento cuando construyes el muro entre tu y tu cuerpo.
Entonces caminar se vuelve algo imposible, místico, trascendente, inalcanzable.
Ya nos hemos olvidado del paso.
El paso, tan sencillo y humilde a dejado de servirnos, por eso no es usado.
Ahora el desplazamiento tiene que ser mas sofisticado y de sofisticado impide que se produzca con eficacia.
Se humilde.
Vuelve a la sencillez y comprende que en ella radica la eficacia de tu movimiento.
Da el primer paso. Sea donde sea, y suceda como suceda, da ese primer paso.
No tienes que tener un gran argumento ni una misión trascendente en esta vida, solo da el primer paso.
Con el camina.
Camina porque es tan sencillo como enganchar varias de esas unidades.
El resto es el peso de tu ego, de tu futuro o tu pasado.
Pero camina porque en el movimiento esta la vida.
Camina hasta que de ti te hayas despojado.
El pensamiento
La ordenación de tu vida depende de la ordenación de tus pensamientos.
Querer controlar los pensamientos es como querer detener el mar con un castillo de arena.
La intención es bonita, pero la realidad se impone.
Dentro de ti, dentro de cada uno de nosotros, existe una fuerza tan poderosa que no puede ser doblegada, pues en esa propia intencionada doblez ella misma encuentra estimulo a su acometida.
Presionarte a no pensar, es la mejor manera de pensar en porque no debo pensar.
Con lo cual sigues pensando.
El problema no viene por pensar, sino por pensar en exceso.
El problema viene de la necesidad de dar consistencia al castillo de aire que hemos creado, y con esos visos de realidad pretender que luego el exterior se adapte a ello.
Existen dos vertiente de una misma circunstancia.
En una te lleva a la auto consumición.
La otra te lleva a la regeneración.
Las dos vertientes son solo muestras de la quietud.
Si, de estar quieto, inerme, moderado.
La mas profunda de las quietudes, de las permanencias produce un estado de oposición a nuestra sensación habitual de proyección dinámica.
En ese momento la mente tira de todo tu cuerpo.
La mente que es la expresión de tu chi, tiende a hacerte levantar.
Quiere que te muevas y para ello coloca, poco a poco donde ella se deposita, en lugares mas alejados, hasta que llegas a lo irreal.
La propia construcción del pensamiento.
Su propia cimentación en el lenguaje, se convierte en una persecución de un tiempo no producido y de un espacio no creado.
Si esto es así, ¿por qué seguirlo?
No es que tu lo sigas, es solamente que estas vivo.
Si comprendes que dentro de ti existe una fuerza imparable, no trataras de luchar contra algo que te supone estar perdido.
Te acuerdas que hablaba de dos vertientes.
En una esta toda la fuerza de esa corriente, es la continua concatenación de pensamientos. En el otro lado tienes la mas profunda de las simas de la quietud: la meditación.
La diferencia viene en que en una sufres mientras que en la otra permaneces.
En una te hallas a merced de las continuas embestidas de tu propia proyección.
En la otra te hayas unida a la generalidad del tiempo del silencio, en un pequeño sueño de vigilia.
El pensamiento estructurado.
Hemos bajado a la meditación.
Hemos llegado al estado desde donde mas cerca podemos estar en una unión con lo que somos nosotros mismos.
Hemos llegado a ese estado de ausencia donde nos podemos observar.
Es la búsqueda de la vía a través de la paradoja.
Una paradoja que consiste en comprender que para estar mas consciente de nosotros mismos es necesario salirnos de nuestro alrededor.
Si observas veras la quietud.
Si te observas no te sentirás diferente.
Desde ese estado te esta permitido entrar.
Solo si te encuentras totalmente en equilibrio te puedes subir a esa vorágine de pensamientos, para permitir que su flujo continuo te lleve de vuelta a tu tierra.
Es como si estuvieras en una tabla cabalgando sobre las olas.
No solo se trata de estar arriba, se trata de permanecer en equilibrio.
Este equilibrio, y esa es la clave, no consiste en luchar en contra de los distinto envites, es consecuencia de saber mantener el centro de gravedad enraizado.
Si eres capaz de mantenerte indiferente.
Si eres capaz de verte como el que ve una película que no le interesa.
Si eres capaz de no identificarte, puedes perfectamente echar un barco de papel en la corriente para que descienda.
Un barco de papel, es una idea, un concepto, algo que te da vueltas en la cabeza.
Si permaneces indiferente, si ves el viaje de tu barco por el descenso embravecido de las primeras lomas, veras como cuando el caudal se calma produciendo meandros, logras recibir trasformado el barco que lanzaste a la torrentera.
No has tenido que hacer nada, solo permanecer indiferente y dejar que sea el propio turno continuo de pensamiento pula como pule el río los cantos de las piedras hasta convertirlos en cantos rodados.
Recoge lo que has entregado al río y tendrás tu pensamiento estructurado.
Yendo mas alla de la montaña, encontraras el camino
Yendo mas allá.
Para ir mas allá, es necesario pasar.
Pero para pasar, y eso lo saben bien los atletas, es necesario que tu mente haya franqueado anteriormente esa marca.
La montaña. El franquear esa marca, supone la capacidad de dejar atrás tus propios pensamientos.
Los pensamientos no son tu pelea, no entres en ella.
No puedes ni superarlos, ni vencerlos, ni apagarlos, sencillamente no es tu pelea.
No tienes absolutamente nada que ver.
Los pensamientos me recuerdan al boxeador inferior que la única posibilidad que tiene es montar un trifulca tabernaria para la superación de un rival que es mas poderoso.
Ante esos rivales no pelees, boxea.
Pega y márchate, no entres en su juego.
Yendo mas allá de la montaña te es factible llegar al camino.
Pero no dejes que la demora en la percepción de algo te impida llegar a tu meta, tu lucha es otra.
El deseo, la primera de las ausencias.
Todo se compone de si mismo y su negativo.
El amor es una cara del odio.
La muerte es una cara de la vida.
Su opuesto es su complementario.
En el amor, su ausencia es solo una cara de su existencia.
Si llamar a una obliga a la otra.
Si lo positivo engendra en su propia definición lo negativo.
Si eliges y al elegir optas también por el contrario aunque sea en negación.
De la misma forma el mas absoluto y profundo de los deseos de algo se convierte en el primer factor de poseer eso que anhelamos.
Es un simple mecanismo de opuestos complementarios.
Conseguirlo es solo activar la mente para acercarnos a lo que hemos definido en nuestra mirada.
Si realmente en nosotros existe ese vacío, ese vacío será llenado, es esa la fuerza de la mente.
Desear es el primer paso de una realidad. De un vacío que has de llenar.
Compasión
La vida es un reflejo.
La vida es el reflejo de un espejo.
La sonrisa.
Esa bendita sonrisa que ilumina la cara.
Esa sonrisa derrama una línea de luz.
Reflejada es como un prisma que rebota desde sus caras a espacios recónditos de cristalitos de luz.
El brillo se desmaya desde el cielo.
El brillo se rompe en miles de haces que se llenan y se deshacen e iluminan un universo sin luz.
Es la sonrisa de lo que se ha cumplido.
Es la sonrisa del que ha cumplido.
En varias ocasiones he visto esa sonrisa.
Al principio no sabia su procedencia, ¿quién la puede saber?
Solamente te quedas parado delante de ella y tratas de mirar a la persona que posee ese rostro iluminado.
Las mañanas son las mañanas siempre.
Cada vez que sale el sol, los procesos de despertar del mundo son semejantes, en todo caso, si vives en Madrid, notas un cierto anonimato en todo lo que te rodea, porque lo que te rodea ya es distinto de ti.
Tu puedes ser sustituido que nada se produce ni altera, y en ese dolor de no ser, en esa ausencia del saludo, del compartir instantes con quien en ese instante es tu feligrés y nunca llegara a ser amigo.
En esa mañana, mañana común de cada día, en una esquina de la glorieta semejante a cualquier esquina que dobla dos caminos un rato de silencio era extendido.
Un rato de silencio, de pausa, que de pronto te tocaba a la espalda y al girarte veías que nada había sucedido.
Estampas y rosarios.
Estampas y rosarios eran su mercancía.
Mercancía de una sonrisa de un milagro de algo reducido a su mercancía de rosarios y santos del ornamento divino.
Pero ¿quién me había tocado?
El tiempo del silencio que había parado el ruido.
La luz de un interior frente al amanecer entre edificios.
Una persona que sin necesidad de moverse se había movido. Pues desde su interior, su insultante fuerte a lo que hoy se considera casi divino, ambición y poder, me había sorprendido.
En su cara la sonrisa, esa sonrisa que trato de explicar en todo este episodio, me había sorprendido.
allí la vi. por primera vez y trate de pagar con monedas los rosarios que de sonrisas me había cogido sin ningún tipo de permiso.
Hurté su sonrisa pagada en cuentas engarzadas que si le da la luz se iluminan durante un tiempo aunque esta se halla ido.
Pero su sonrisa, su reflejo, no se ha perdido.
La televisión de madrugada suele tener en su programación los espacios destinados a quien no suele entrar en la dinámica de espectáculos continuados de los que en horario principal se emiten.
Una de esas madrugadas habían cogido al Dalai Lama para una entrevista.
Con la misma profundidad que un gua, las preguntas se fueron sucediendo en un profundo estadio de aburrimiento.
Con media hora mal contada fue suficiente.
Por piedad al personaje termino la entrevista.
Se despedían cuando en un momento junta las manos.
En actitud de oración cerca de la barbilla, una ligera flexión de saludo hasta que en un instante una sonrisa se produjo.
No fue necesario que pasara mucho tiempo.
Es mas apenas si recuerdos los segundos o la medida necesaria para definir esa imagen, pero lo que si supe era que algo muy especial estaba sucediendo.
Han pasado los tiempos.
Esos tiempos que escriben líneas en tu vida.
Por ellos hoy en día se definir que es lo que sucede, que es lo que provoca, esa sonrisa.
Es un proceso que se inicia en el amor.
El amor, aparte de la expresión propia de lo que se define como tal, es una de las dos fuerzas que mueven el universo.
La división de Eros y Zanatos se define perfectamente en este periodo de definición.
Pero mi explicación la voy a llevar a márgenes mas cercanas a la realidad, la mía o la tuya.
La compasión es el estado al que se llega mas allá del amor.
Cuando has amado.
Si, cuando has llegado esos niveles que superan la propia relación de pareja.
Cuando logras comprender el concepto del amor mas allá de tu propio objeto, aunque radique en el, en esos momentos logras entrar en un estado de perfecta comunión con el universo.
Has llenado tanto tu cuerpo de amor, que este se derrama.
Es como cuando llenas un recipiente y este se desborda de contenido.
El amor a la persona se transforma en una amor a todo el universo.
Se trasforma en una sonrisa que muestra un camino que se ha cumplido.
En ese momento todo lo que reflejas es un proceso creciente donde el mundo actúa como un frontón que te devuelve la bola que le tiras.
Si tiras una pelota de tenis, nunca te devolverá una de baloncesto.
Si siembras un manzano nunca saldrá un peral.
Si desbordas amor solo recibirás amor.
Con esas sonrisas las defensas se bajan pues estas en un estado de comunión con el mundo.
Desde un punto de vista mas analítico, hablamos de procesos de no discriminación.
Si no discriminas, si o bien ama u odias a todo lo que se mueve o esta quieto, el mundo es uno.
El mundo es uno y al ser uno se siente un extraño estado de trascendencia.
Es en uno de esos instantes donde notas que vives olvidado de ti.
Existen pues dos vertientes, las del amor llevan a la vida, las de la elección de la vía positiva te devuelve lo que siembras.
La vertiente oscura te da fuerza, pero en tu propia separación del mundo te lleva a la destrucción.
La vida lleva implícita la vida, y la destrucción lleva implícita la destrucción.
Por eso la sonrisa de la plenitud solo se produce en los estados donde habiendo llegado al limite del amor, esta ha rebosado tu estanque como en una derrama que se extiende por los campos de la fertilidad.
Si aun no has llegado a ese estado solo se necesita que el tiempo llegue. Mientras sonríe a la vida como la lagrima que desborda el ojo de quien mas quieres cuando esta en frente.
sonríe e inicia el sentimiento de vida en tu seno.
Todo es Chi.
Todo es energía e intención.
Chi quiere decir energía e intención.
El hombre es parte de ese todo.
El hombre es chi.
EL HOMBRE ES ENERGIA E INTENCION.
El hombre busca la excelencia.
Cuando el hombre se separo de su cuerpo,
el hombre se separo de su alma.
El hombre se desprogramo de la excelencia
y sucumbió al éxito.
Algunos rezaron.
Rezar es el primer paso de meditar cuando el hombre no se ve así mismo.
Donde buscas el dios es donde has perdido tu identidad.
Pero al menos meditas.
Solo es necesario que un día el azar, como Narciso, refleje tu imagen en el río.
Un río de silencio.
Un río, que es como el vuelo de los labios de Morfeo, donde en su sueño se mide el anhelo, la confirmación y la testificación de otra realidad.
Ese mundo que se desarrolla en paralelo.
Ese mundo que es como un beso que no te despierta.
Ese mundo que es un sueño allá donde dijo el poeta que la vida también lo es.
El vuelo del espíritu que no retorna.
La mirada intuitiva al ave que se eleva y en el batir de sus alas se asemeja a tus labios.
El ave, el vuelo, los labios y Morfeo no pasan de ser elementos de mi sueño.
EXPLICANDO UN PENSAMIENTO DEL ESTADO DE AUSENCIA.
La ausencia es un espacio que te concedes para crecer.
En plenitud solo observas complacido.
Es un buen estado efímero.
Te complace tu propia aquiescencia.
Pero solo en ausencia los triples saltos tienen cobijo.
Yo, que en este ultimo tiempo me hallo en continua ausencia.
Yo, que no encuentro cobijo.
Yo, dispuesto a copar los espacios de mi pensamiento, trato de encontrar en el sueño de Morfeo el medio de agrupar mis tropas para la batalla del alma y sus recuerdos.
LA MEDITACION INTUITIVA ASISTIDA.
Meditar es un acceso a los márgenes.
Un acceso a los espacios del silencio.
Hablamos de meditación con lo que nombramos una muestra de la plenitud.
La meditación es el proceso de fijar la mente.
La mente se fija cuando se logra atarla a un solo pensamiento.
Esto se produce a través de la inestabilidad de sus sentidos.
La meditación es una inducción al control.
Es intuitiva porque en ella se busca la entonación.
Una entonación que es una propuesta al vuelo de tu espíritu.
Asistida, pues en todo momento se guían sus pasos, mientras como espectador de una película, se camina a su lado.
No olvides que como asistente eres el director, mas no el protagonista.
LA HIPNOSIS Y LA MEDITACION.
Muchas manos se tienden entre ambos.
Lo primero que hacemos es fijar la mente consciente.
En uno a través del abandono, en otro a través de la vigilancia.
Donde se ata la conciencia se sustituye esta por otra voz que gobierna.
En unos es a través de un pensamiento reiterado, en el otro es por medio de la sugestión. El caso es que en ambos es otro el que gobierna.
Estamos hablando de abrir de par en par nuestras puertas ante una cesión voluntaria.
El paso ya esta dado, ahora solo actuamos en un proceso de programación de nuestros procesos cognoscitivos.
Siempre actuamos sobre el alma.
El alma engloba al campo energético que da sentido al cuerpo.
Hablamos de las potencias del cuerpo, allá donde los sentidos se expresan en sensaciones.
Los caminos llevan a un estado de abandono donde la relajación es el centro.
En relajación y con el centro del pensamiento en el tandem hallamos la verdadera fuerza de nuestro poder espiritual.
LAS VIAS DE ACCESO.
Meditar es una continua búsqueda del vacío.
La vía del vuelo es la introspección.
Un viaje fantástico al centro de la tierra de la nada.
Hay dos vías de acceso.
En una se desciende las escaleras del sueño paso a paso.
En otra se toma un ascensor que va directo pero en su imagen, nuestra retina fija en todo momento en un plano único, la luz que ilumina la planta en la que nos hallamos.
El sueño de Morfeo se constituye en una inmersión en búsqueda de la luz, en la umbría del alma.
En la vía rápida me tienes que dar la mano.
Es necesario que confíes.
No pienses ni elucubres, solo HAZLO.
¡Si! Dame la mano.
Tiéndela como cuando paseas una tarde de domingo mirando escaparates y puestos en la calle Fuencarral.
Esa mano que tiendes no para agarrarte sino para simplemente saber que al otro lado hay algo.
Cierra los ojos.
¡VAMOS! Cierra los ojos.
¿Paseamos?
En el otro sitio solo has de permanecer.
Permanecer como esas tardes de atardecer.
Esas tardes donde en el poniente te permite mirar al Sol sin que este te ciegue.
Aquí no te acompaña nadie aunque estas con todos.
Pero ahora olvídame y sigue manteniendo tu atardecer interior.
EL VAIVEN DE LA PLAYA.
El Tai-Chi es el continuo mecer de la madre que quiere dormir al niño invitado al sueño en la playa de un mar.
Va y viene en su vaivén, rítmicamente, como la lectura lenta de un verso.
Como el nombre de quien pronuncias despacio para grabarlo en tu corazón.
así te meces como en un no querer dormir el sueño que te envuelve.
Paz
Relajación
Mecimiento de tus sensaciones hasta el sueño.
La TRANQUILIDAD es tu estado habitual.
No pensar es la capacidad de mantener en ti todos los pensamientos.
Del mismo modo, la relajación es la capacidad de centrar en ti toda la fuerza del universo que fluye por ti. Que no es distinta a ti.
En el día a día la energía se convulsiona.
En su agitación asciende en un terco torbellino que provoca mas agitación.
Pero ahora no estamos ahí.
Hablamos de ello y quizás por eso pensamos que es real.
¿Has probado alguna vez a leer sin sentido un texto en un idioma que no comprendes? Pues ese es el valor exacto de las palabras. Esas mismas palabras que e provocan tanta agitación.
Ahora volvamos a la calma.
¡Ven! Vamos a casa.
Volver a tu cuerpo es volver a tu casa, y por eso estas tranquilo.
¿Ya has vuelto?
Hoy quiero que te sientas como en uno de esos días que llamamos BUENOS.
Uno de esos días donde tienes tantas ganas de contarlo que el borbotón de palabras tapan tu predicamento, para al final solo quedar el sosiego del silencio cuando tienes todo que decir y no hay un viento que recoja y extienda tus palabras.
Hoy cuando podías llenar el mundo con tus recuerdos solo te queda el silencio.
Has respirado dos veces. Dos veces muy profundas.
Estas en casa, estas en ti. Estas en silencio.
VAMOS A JUGAR.
Ya has completado una parte.
Una parte de ninguna parte que era donde estabas, en tu vuelta a ti.
Ahora te pido que juguemos.
Vamos a jugar a te enteras pero no te das cuenta.
Quiero que leas pero no te enteras.
Ya has logrado estar en ti.
La unificación mente cuerpo es una de las cosas mas difíciles, pues te obliga a ser tu mismo.
Ahora te invito a otro camino: la poesía del profeta. Que es aquella que habla directamente del dios que hay en ti mismo.
El camino de los versos del juego en el que no te das cuenta pasa por la visualización del dios que hay en tu destino.
Independientemente por lo que luche, su origen es divino.
¡Que mas da si su religión otros la tachan de pecado!
Es tu dios y con eso basta.
Quiero, sin darte cuenta, que centres tu mirada en el.
Ahora comprueba que lo que ves es tu reflejo.
Lo mismo que cuando te levantas y te miras y ves una cara con sueño. Ahora también tienes delante tu propio reflejo.
El juego que no te das cuenta cesa, pero no cesa tu recuerdo.
EL PRIMER VUELO.
Tu primer vuelo es la RELAJACION al producir el abandono de tu soporte.
Tu, convertido en tu dios, has salido de ti dejando tu cuerpo yerto. Mas tu estado en ti fuera de ti, en el plano donde el mundo no tiene espacio porque el tiempo ha sido eterno.
ESTAS RELAJADO EN EL ESPACIO DONDE EL TIEMPO ES ETERNO.
EL SUEÑO DEL MEDIODIA.
Ahora me gustaría que sintieras el calor del verano que acaba de comenzar.
Hablamos de esas horas del estío donde hace tanto calor que parece que las cosas no tienen sentido.
En la casa todo se ha parado.
La mente se oculta en habitaciones oscuras. Yo siempre recuerdo en estos momentos, la casa del pueblo en la que pasábamos los largos veranos.
La siesta era siempre una regla, una norma fija insoslayable.
Ahora quiero que vuelvas a ser un niño.
¿Te acuerdas?
Vuelve al descanso de después de la comida en los calurosos días de verano.
En la puerta de la casa había una cortina que con algún retazo de viento se movía.
Cada vez que esto se producía un torrente de luz blanca se metía por unos instantes en el pasillo. O cuando alguien entraba y corría la cortina toda la luz profanaba el santuario de tu estancia.
No puedo imaginar nada que incite mas al descanso.
Un descanso que era la principal regla después de las comidas.
Vuelve a la habitación oscura.
Vuelve a la sensación de la cortina que se mueve dejando pasar la luz blanca.
Vuelve...
VUELVE....
VUELVE A ESE DESCANSO.
LA MIRADA QUE NO SE PRODUJO.
Los ojos siempre se encuentran.
Los ojos están puestos todos a la misma altura para que se puedan encontrar.
En la mirada va sumida la primera palabra que quieres decir a quien observas.
La meditación es muchas cosas, pero una de las primeras es una mirada.
Detienes la vista para detener el alma.
Detienes la vista como se detiene el vuelo de una mariposa.
Deposita en tu mirada todo el ajetreo y mantente sujeto como el viento que sopla y de pronto se detiene.
mantén la mirada y fija el pensamiento.
HASTA AHORA...
Hasta ahora... hemos empezado el proceso de reprogramación de la mente.
Para ello hemos desplegado todas las premisas necesarias para fijar el consciente.
Lo primero es la relajación.
Pero el cuerpo no sabe relajarse.
Cuando dices a alguien relájate, él entiende que le están diciendo que esta en tensión.
Pero el cuerpo si recuerda cuando se relajo.
Como logro mirarse a si mismo y verse en ese estado. Esos recuerdos si le pertenecen.
Tu ya lo has logrado con una evocación a esos estados.
así la relajación se convierte en la posibilidad de determinación de todas las posibilidades.
HASTA AHORA LLEVAS ESO HECHO, PERO SOLO HASTA AHORA...
Obsesión.
Obsesión es el sobreactuar de la mente como mente.
Se pierde la finalidad en el medio, por eso nunca llega al fin.
Obsesión es permitir que las cosas te superen.
Y las cosas son solo cosas, en todo momento.
Tu como habitante de un mundo, como caminante de un tiempo.
Ahí se cierra el mundo.
Converge en un punto y reflejado en el se sobredimensiona.
Es obsesión, ver solo ese punto es obsesión. Es el transito por el pasillo estrecho de la angustia.
LA SALIDA.
La salida esta allá siempre donde la vista no se detiene en los medios.
Meditar es la vía.
Pensar en meditar es obsesión.
Por ello debes busca siempre la sensación de salida.
Conviértete en ausente de ti.
En ese punto de ausencia se halla tu presencia.
Permite el vuelo del alma que siente en sus alas el aroma de ti.
Surges así, de un tiempo no transcurrido para ser juez, no parte, de los pensamientos de duda que has contenido.
Ahora que no estas en ti, mírate.
Siente como has escapado de ti.
Es ahora cuando mas estas a tu lado.
Eres consciente de toda tu historia.
Como lo es el escritor del personaje de su obra.
En esa percepción de ausencia te eriges en el campo de la existencia pura.
La salida de ti es alcanzar el Kensho y en la salida de ti es abrazar el estado de samatha.
Solo eso.
Pero por favor, no pienses en ello.
Por hoy permanece a tu lado y siente como actúa tu cuerpo sin ti.
PARAR EL TIEMPO.
La primera arte de las artes es parar el tiempo.
Los guerreros paran el tiempo.
El sabio vive fuera del tiempo.
Cada uno vive en su tiempo, menos los que han salido fuera de si, esos viven en los margenes de lo que es convencional.
Parar el tiempo es permitir que tus sueños te persigan a ti.
Cuando no estas es cuando todos te buscan.
Al no estar, tu vacío, se convierte en una ausencia que atrae otras presencias, pues hoy en día es muy difícil encontrar tu hueco donde existir.
Parar el tiempo es esa foto instantánea de un Madrid nocturno donde las luces se mueven en la trayectoria de un instante dejando en sus haces la descripción de movimiento.
Y mientras todo se mueve en líneas de colores, siempre hay una figura estática que permanece mirando el mundo.
Ese es el culpable de que se haya parado el tiempo.
Solamente en tu apogeo energético describes ese momento como los ojos que se cierran en un beso.
Los que permanecen con ellos abiertos no paran el tiempo.
No quieren traspasar el umbral de la eternidad.
La eternidad no es parar el tiempo.
La eternidad es una etapa donde no existe futuro ni pasado.
Pero ese presente continuo aun es tiempo.
Vamos a parar el tiempo.
Cierra los ojos. Sella tus parpados, la ventana de entrada del exterior e involuciona tu mirada a ese vacío constante de tu interior.
Enseguida tu saldrás de esa nada.
Debes pasar de la oscura ansiedad a la luz del que necesita guiarse.
Tu vida es sentida, halla en ella la guía.
allí donde el silencio te hizo preso un segundo contiene tu deseo.
Mas tu cierra las ventanas y huele el sonido del silencio.
Fuera de ese estado solamente aquellos que han salido de si.
Aquellos que pueblan los márgenes, pueden guiarse en la oscuridad de unos ojos cerrados que ya no son suyos.
PARAR EL TIEMPO ES UNA POTENCIA DE LOS QUE ESTAN FUERA DE SI.
Tu entrenamiento es el vuelo de tu espíritu.
Es la constatación de una imagineria que te lleva a transportar en tu interior, a otras partes, un cuerpo intangible.
En ello reside las muestras de tu obrar.
En el trazo de un tiempo y espacios imaginarios de líneas de actuaciones.
Estamos hablando de la danza secreta del alma.
En términos mas comunes, estaríamos hablando del entrenamiento ficticio del toreo de salón, del boxeador haciendo sombra, de la danza del tai-chi. De los swings de golf realizados al espejo. Pero también me refiero a esas veces donde se usa la mente para diseñar actuaciones. Un concepto denominado VISUALIZACION.
El problema de todo esto es que se produce siempre con la separación mente-cuerpo.
No estamos enseñando al cuerpo a actuar, si quisiéramos eso obraríamos de otra manera.
El cuerpo esta bien donde esta.
Vamos a bailar en el silencio para que podamos dibujar con nuestras manos burbujas al viento.
Es como si en nuestros dedos se durmieran los deseos.
Tiene que ser tan suave como si acariciaras el rostro de un niño que duerme, que no debe despertar.
Al principio la mano es mano, pero antes de su contacto, esta se desmaya, como si los dedos se te quedaran flacos.
Desde ahí todo se engarza en una danza donde la cara reproduce la quietud del que se ha ausentado.
Y tu, que has comprendido la dimensión de lo que ocurre, sonríes con beneplácito.
Toda esta actuación se produce en el mas puro desapego, pues en ello, nos referimos a lo que es técnica pura.
La técnica pura, es la actuación pura en la existencia pura.
Pura, pues se halla sin la mancha de la realidad.
La primera de estas manchas las produce las sensaciones y sus sentimientos.
Tu, como tal, o serias cobarde o te envalentonarías, pero ahora, en este instante, es el entrenamiento el que tiene que actuar por ti.
Mira lo que estas haciendo, lo has hecho tantas veces que ahora tienes que cerrar los ojos y dejarte fluir
TU DIOS
DIOS ES LA CAPACIDAD DE CREAR DE LA NADA.
Aunque en su jardín resida el hombre, ¿cuántas veces no se ha sentido ajeno a el?
Es solo una búsqueda por los mundos donde nosotros le hemos puesto.
Por eso no se le encuentra.
Lo escondimos en el único lugar donde nunca miraremos.
En nuestro interior.
De aquí, la primera línea tiene que dirigirse a la naturaleza intrínseca del hombre.
Es en ella en el única sitio donde puede radicarse la deidad.
Pero nosotros hemos querido tener un dios aparte, aunque se nutra en su totalidad del hombre.
Casius Marcelus Clay, mejor que ningún santo, describió a dios.
Fue en su faceta de loco o iluminado.
El tenia que enfrentarse con una fuerza de la naturaleza llamada George Foreman.
En el, en Clay, no solo se representaba la lucha contra otro ser humano. Era la lucha contra un universo que ya le había sentenciado.
El, llamado entonces Mohamed Ali, busco su dios en las causas justas que el defendía en una realidad africana oprimida.
En ese momento ya no era un hombre que luchaba.
En ese momento se erigía un gigante, y era ese gigante, el que tomaba el testigo de la lucha.
Su causa ya no era solo su causa, era la causa del dios de un pueblo que clamaba justicia.
Era el dios de los pobres, de los marginados, de todos los apatridas, era el dio de la injusticia social. Era la lucha de la desesperación del orgullo perdido de los desarraigados.
Y ante eso, ninguna fuerza podía pararle.
En el loco de Louisville se da la persona de aquel que acepta su dimensión histórica y la acepta.
En el máximo rendimiento, cuando estas fuera de ti, eres capaz de buscar en ti, ese dios que te habita.
Desde el, prueba a actuar.
LA BUSQUEDA DE LA DIMENSION ACTUANTE DEL HOMBRE EN FUNCION DE LA EMPRESA A LA QUE SE CONSAGRA.
VER
Ver es ir a un sitio dos veces.
Siempre la primera vez no te enteras de nada, andas como perdido.
Cuando vuelves por segunda vez, al ser todo mas conocido eres capaz de aprovechar mejor las circunstancias que se producen.
Ver es volver a un sitio donde lo que se produce ya es conocido.
Religión es el acto de volverse a ligar a un mundo al que perteneciste.
En la religión se ve por medio de la fe.
Fe es volver encontrarse con un sitio conocido.
Es tener la convicción intrínseca de que ya has estado ahí, aunque ahora no sepas definir porque lo sabes.
OLVIDARSE DE SI MISMO.
Tienes que olvidarte de ti.
Si. Tienes que olvidarte.
Es normal que no puedas, llevas tanto tiempo contigo.
Pero has de separarte.
Si logras salir durante un instante fuera de ti, habrás iniciado el camino.
Mírate, ahora que estas fuera, verdad que resulta cansado ser todo el día así.
Ser brillante y ser eficaz, tu trabajo y la familia, por no hablar de esa sensación de angustia, que desde la boca del estomago, como una depresión de energía, parece que todo el cuerpo te anuda.
Ahora que estas fuera, te das cuenta de todo lo que arrastras.
Por eso, muchas veces, cuando anochece y te quedas solo, te sientes tan pesado.
Cada vez que hablas de ti arrastras un fardo donde metes el hierro de aquello que has sido.
Lastras todo tu camino tanto con tus anhelos cumplidos como con los olvidados.
Esos que no has cumplido, que creíste superados, pero que en noches como esta, de luna de estío, se te agarran al pecho y no te dejar respirar.
Tu ego, es la maleta que llevas. Y en cada paso hincas todo su peso en la tierra e igual al siguiente paso y al siguiente.
RESPIRA.
RETEN EN TI EL ALIENTO.
Estas parando los pensamientos.
Date cuenta del poder del aire retenido.
Si, ya no hay pensamientos.
no hay pensamientos.
no hay.
no
hay.
Ahora mismo has decidido pararte y dejar caer la mochila, que
aunque castigo, tu llamas tu vida.
Ahora, con todo el poder del espíritu que te da tu aire retenido, te agitas como un elefante del que han colgado miles de fardos que ahora has convertido en hormigas.
Agitate con tanta violencia que desprendas de ti toda esperanza y angustia.
Agitate tanto que desprendas todo de ti
AGITATE TANTO QUE LOGRES EMPEZAR A OLVIDARTE DE TI.
EL RETORNO.
Todo avance es una vuelta a los orígenes.
después de las vicisitudes de la vida solo te queda descansar allá donde naciste.
allá donde fuiste un niño.
Te sugiero una vuelta al barrio.
A correr por la plaza.
Al fin del curso.
A la mirada...,
a la mirada de niño.
LA MIRADA DEL NIÑO ES ESA QUE MIRA LAS COSAS COMO SI FUERA LA PRIMERA VEZ.
Y esa mirada solo se tiene al principio... o cuando se esta de vuelta.
Ya noto tu regreso.
Aunque no seas de un barrio, tu infancia tuvo un teatro.
Vuelve, pues nunca has salido de ahí.
Vuelve, y en esa mirada comprueba como en los orígenes se halla el paso de tu mañana.
No tu mañana, solo el primer paso que te encamina a el.
Yo, ahora me voy, mientras tanto te dejo jugando a lo que quieras, disfruta tu tarde como niño, piensa que es un día añadido a tu ultimo día del verano.
Aun están todos los amigos y te queda todo un mundo por conquistar.
¡DISFRUTALO!
LA VIA DEL PENSAMIENTO UNICO.
Ahora te pido que confíes en mi, TE RUEGO QUE ME SIGAS...
HEMOS VUELTO al espacio de la esperanza.
Limpio de tu pasado, como después de un prolongado baño.
Siéntate a un nuevo espacio mas blanco que el blanco mas pálido.
Fresco como el olor que desprende la hierba recién cortada.
Diáfano como una habitación que aun no ha sido decorada.
Entra y siéntate.
Déjame ser tu anfitrión...
YA HAS VISTO EL PODER DE TU MENTE.
TU MENTE CUANDO VUELA TEÑIDA DE TU ESPIRITU, TODO LO LOGRA.
AHORA VAMOS A DEJARLA VOLAR A NUESTRA CONVENIENCIA.
ENTRAMOS EN LA VIA DEL PENSAMIENTO UNICO.
Primero debes saber que en ti, existen varias mentes.
Si notas que te flaquea la fuerza de voluntad, o los pensamientos te perturban, solo tienes que apretar al máximo la parte baja del vientre.
Todo lo que seas capaz de imaginar y lleves a un punto central situado entre los ojos, lo podrás convertir en realidad.
Todo aquello que seas capaz de sentir a través de tus dedos con los ojos cerrados, solo eso es real.
LA VIA DEL PENSAMIENTO UNICO ES AQUELLA QUE ENFOCA TUS MENTES A LA CONSECUCION DE ALGO QUE DESEAS.
Si no existe ese deseo, la cosa no existe.
Si no eres capaz de verlo entre ceja y ceja, esa cosa no existe.
Si no eres capaz de tocarlo con los dedos, este donde este, esa cosa no existe.
Si no eres capaz de apretar la tripa, esa cosa no existe, pues tu tenacidad se diluye.
En la vía del pensamiento único, todas las vías confluyen.
Usa tu mente para alcanzar tu universo.
El resto solo es tiempo del tiempo
...Y bajo un Ángel.
Desde el final, donde se deposita un sueño, del cielo desciende con la suavidad de un verso un ángel.
Lo has visto.
Muchas veces te sucede y no te das cuenta.
Muchas veces te sucede y estas tan atareado que no miras.
Muchas veces sucede... que del cielo un ángel desciende.
Yo, que mi trabajo es tratar con gente, logro algunas veces vislumbrar su estela.
Un ángel no es una pertenencia de nadie.
Un ángel no es una constante. Que pobre seria si así fuera.
Un ángel es un estado que determinadas personas tienen.
Es un estado de gracia.
Es una ventana que desde tu cabeza se abre al cielo y desde el desciende hasta llegar a tu mirada.
Un ángel es la expresión de la belleza sin palabras.
Un ángel no tiene sexo, es un simple estado de absoluta identidad con el universo.
De un ángel solo se me ocurre decir que es tan hermoso que es un insulto calificarlo, pues en el encierra parte del estado del silencio que todo contiene del universo.
Un ángel es una derrama de amor en un punto de tu cuerpo.
Un ángel es una mirada lánguida al silencio de la tarde comprendiendo que tu presencia permite entender la esencia de los secretos.
Un ángel es un estado de instante prolongado en el tiempo.
Un ángel es un ascenso a la eternidad.
Un ángel es la unión de lo sublime y lo sutil que puedo concebir.
Inmortalizar un ángel es cerrar los ojos y entrar en tu recuerdo.
Si. Porque en ti existió.
En ti guardaste en tu seno la inmaculada concepción que me hizo comprender que este mundo era hermoso.
Que la vida era algo mas de lo que al resto de la gente se le mostraba.
Un ángel fue el que me metió en la búsqueda de universos paralelos que me permitió ver y comprender lo que ahora creo.
Un ángel es ese estado de protección donde siempre me quedo.
Un ángel es ese estado donde el amor no es suficiente para tenerlo.
Un ángel eres tu.
Un ángel eres tu y lo demás es sueño, el sueño de los labios del beso de Morfeo.
El sueño de una noche de verano.
Y una noche me levante bañado en otro olor.
Bañado en otro lago que aquel al que cada noche descendía buscando limpiar mi pasado.
Bañado en otro olor, bañado en otro espacio.
... y hubo un momento en el que las montañas volvieron a se montañas y los lagos eran lagos.
Las montañas dejaron de ser los cúmulos del pensamiento.
Los lagos dejaron de ser los lugares de purificación.
Por eso, las montañas volvieron a ser montañas sin pensamientos.
Las vuelvo a ver con sus colores y estaciones, mas viejo pero mas sabio, pero sin dolor. Por eso los colores tiñen las estaciones, los ruidos envuelven los rincones, el aire se vuelve vida y los ojos lloran y miran.
La vida vuelve a ser vida.
Todo el mundo que mi mente creo sirvió para soltar el lastre que me retenía.
Ahora solo guardo conceptos, solo guardo conocimientos del transito del ultimo pago del que se hallaba en mi vida.
“...y cuando llego la tarde se lleno de compasión, y en ese momento se le devolvió la vida.”
Un epilogo.
Todo libro, por raro que sea, tiene que tener un epilogo.
La conclusión es siempre el punto de reflexión, solo que aquí, en este caso concreto es mejor que esta no se haga.
El viaje es siempre un viaje.
El viaje es consecuencia de un desplazamiento donde la única detención se produce en el momento de tomar conciencia.
Obviamente todo ha sido una proyección tuya de tu exterior al interior para luego abandonarte.
Te he sacado fuera.
He querido que retornaras a los momentos de tu vida.
Tu vida de nuevo vivida.
En los ratos donde el tiempo se detiene por el inicio del sueño, donde antes de que llegue el beso de Morfeo, entras en los estados de control a través de la conciencia.
Fuiste en un pasado y ahora has vuelto, solo para ser consciente, pues ya ha sido, ya todo paso y ahora tu mente te permite volver a tener la oportunidad de revivirlo.
Y en el final llega el ultimo elemento del juego.
¿Qué paso entre un momento y el de regreso?
Todo es igual, solo que ahora debes meter un reflejo distinto al espejo desde que ves el universo.
Si logras por un instante captar la sublime esencia del chi, en el compruebas que todas las virtudes que manifiesta se cierran en un estado de continuo calor en tu cuerpo.
Ese calor que percibes se vuelve sentimiento.
Y entonces el sentimiento se derrama en emoción.
Entras en estados de compasión.
Compasión que derrama el calor de la emoción en una cobertura de tu ser que impregna a todo lo que en el se integra.
Y en ese momento el mundo cobra sentido.
Aunque solo sea ahí, el mundo cobra sentido.
Tu caminar se convierte en un recorrido por una senda donde percibes y distingues cada mirada.
Y el detener su sueño tuvo éxito, antes que llegara el beso de Morfeo.
...NO LE BUSQUES SENTIDO, NO LO TIENE, O NO. MIGUEL MOCHALES, MAESTRO ZEN.
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