Hablar de amor.

No es más. 

Es sólo una promesa.

Una promesa a la quimera. 

A la quimera de amor, en tiempo de amar. 

De sueños que se sueñan.

De apariencias que desaparecen.

De pasión que llena.

De ternura que perece.

De vida que parece,

Promesa de locura y de consciencia.

Así te amo, en todo lo que escribo.

En amor y en lo que esta prohibido.

Miguel Mochales, maestro ZEN.