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El tiempo así mismo se aburre. Por eso mismo a ti mismo eres un tiempo que se aburre asimismo. El tiempo te aburre y tú te aburres con tu tiempo. Entender esta paradoja del tiempo. Comprender la profundidad de aquello que te estoy diciendo es provocar al alma un proceso de locura. Locura la liberación de un tiempo aburrido. La locura no es propia de los trastornados. La locura es propia de la libertad. Y ahora mismo soñar quiere decir no roncar con un pedete lucido. Soñar es el arte del mago del maestro del negociador. Para el desarrollo de la visualización que le libere de su cerebro límbico. Es ahí donde está la última libertad y es esa última libertad la razón de zenPower. 

No te aburras de aburrirte. Abúrrete de no aburrirte. Dile por primera vez no a tu no. La suma de dos negaciones es un si. Pero este si está decisiones est*pida. Si no desarrollas un proceso Profundo De visualización. 

Esta visualización es el arte del pensamiento abstracto para entrar en el pensamiento onírico. 

La ilusión es la descomposición de la eternidad en posibilidades que tú vives. 

El amor es el proceso inherente del Dios que abraza el animal sucumbe a la pasión de lo eterno. 

La vida es la descomposición de un tiempo que no atiende algo que entiende sino el susurro inherente del alma. 

No me cabe en esta vida más posibilidad que agarrar el silencio ensoñaré inverso. 

Inverso es la proporción correcta del todo vista de si misma. 

Así no llorar es beber en el mar las palabras abrazadas al talento del tiempo que siendo te acompaña. 

Por lo tanto todo el proceso de abstracción. Es el proceso necesario de asumir todo el tótem psicológico. Como un recuerdo sutil. De un tiempo especial donde puedas de nuevo recordar una manera de hacer mítica. El espíritu se come descompone en descensos.  Desciendes el cielo al averno para que surja de esa decadencia lo más exquisito. 

Y esto es algo más que un susurro prohibido. 

Y esto se convierten el destino inherentes del ser humano que abrazan talento la posibilidad. La posibilidad de soñarte volar. La posibilidad es soñar y correr en libertad. Sensibilidad alcanzar el equilibrio del universo en tu cuerpo. Por tanto ya no queda nada. Ya no queda nada. La nada que no queda en la posibilidad del todo. Desde todo que se abre. 

No le busques sentido no lo tiene. Miguel Mochales maestro.