Jesús el exorcista.
Hay algo que hace común a todas las religiones.
La mano derecha del amor es la sabiduría.
La mano izquierda de ese amor es ese no desarrollo de esa sabiduría.
Satanas es el amor que no amo porque se quedó en el yo.
El amor que no sucede no se convierte en dios y por tanto no hay ni deseo ni Piedad.
Por eso sucede que el ángel que sube no llega al cielo que es la sabiduría y cae en forma de venganza en sentimiento de dolor.
Todo dolor es ‘ay’ y ese ay en inglés es yo.
Los miedos encerrados en el cuerpo se bloquean en forma de pensamiento creenciay no salen en forma de emoción es decir, pensamiento creación.
Así Jesús quita esos miedos con una creencia que se llama demonio interior.
Demonio es un estado sagrado menor.
Un demonio es algo que no es dios.
Solo así se puede generar energía para parar el tiempo y este amor libera el cuerpo y se llama exorcismo a esta acción de extensión del verdadero amor.
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