- No descansare en este tiempo porque no volveré a verte.
- Me perdí ayer.
- Me perdí en ese ayer donde no cabía mi mañana
- Y le grite a un tiempo que le era imposible soñar.
- Soñando ese tiempo te abrace y se me soltó la lagrima que ataba el ayer al infinito
- Vamos a caminar lento.
- Estamos en el camino que lleva a la playa.
- En esa en la que te bañaste cuando no eras ni un niño.
- Puedo caminar por esa orilla
- Y el tiempo de nuestro ayer fue olvidado.
- Olvidado sin más.
- Y más fue olvidado.
- Así me acerqué y quise abrazarte.
- Es esto muy tierno.
- Muy tierno y me fue difícil beberte el tiempo sin otra esperanza.
- Camino hacia ti.
- Comprende que el tiempo no te persigue por mucho que notes que la noche persigue su mañana.
- Ahora deseo ser yo para alcanzar el placer.
- El placer de un vivir insostenible.
- Ese placer que no sabe por dónde ha venido para volverte a querer.
...no le busques, sentido, no lo tiene, o no. Miguel Mochales, maestro zen
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