Deltoides Lateral 8
El próximo ejercicio se centra en la posición de doble bíceps. Coloca los brazos con los codos a la altura de los hombros y llévalos totalmente hacia atrás, apretando con fuerza. La contracción debe ser intensa, como si los codos quisieran tocarse detrás de la espalda.
Desde esa posición, comienza a juntar lentamente los codos por delante, con suavidad, sin perder el control. Cuando lleguen a la línea de los hombros, detente un instante y tensa al máximo la musculatura, como si toda la fuerza se concentrara en ese punto.
Después, abre de nuevo los brazos muy despacio. La clave está en aceptar la tensión, el dolor y la fuerza: cuanto más lenta sea la apertura, mayor será la intensidad. Lleva los codos otra vez hacia atrás, apretando al máximo, hasta sentir cómo el trapecio se une con el deltoides lateral, creando un bloque sólido de energía y poder.
Este ejercicio no es solo físico, es un diálogo entre contracción y expansión, entre dolor y control, entre la fuerza que se concentra y la que se libera.
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