Movimiento de Conexión Posterior: Palmas Hacia la Tierra
Desde la posición del Cristo y manteniendo la estructura activa, pasamos ahora a una nueva fase del ejercicio que profundiza en el trabajo del deltoides y el dorsal.
Palmas Hacia Abajo: Activación del Deltoides
Con los brazos aún extendidos en cruz:
- Gira las palmas hacia abajo.
- De inmediato sentirás la conexión con el deltoides lateral.
- Al empujar con fuerza hacia atrás, notarás cómo se activa de forma intensa el deltoides posterior, generando una contracción más profunda y poderosa.
Secuencia 1: Pulsaciones Posteriores
Mantén los brazos en posición del Cristo, con las palmas mirando al suelo:
- Realiza pequeños impulsos o empujes hacia atrás.
- Estos micro-movimientos despiertan la musculatura profunda y aumentan la frecuencia energética posterior, reforzando la conexión con la espalda media.
Secuencia 2: Descenso Controlado
Una vez activada la zona:
- Desciende lentamente las manos unos 20 cm, apretando con fuerza el latissimus dorsi (músculo dorsal).
- Vuelve a subir a la horizontal y repite el descenso, esta vez más lento, con un empuje firme hacia abajo y hacia atrás.
- El rango ideal es de 10 a 15 cm, suficiente para que percibas cómo el dorsal entra en un estado de expansión y fuerza.
Este ejercicio refina la conexión entre tus hombros y tu espalda, profundizando en la conciencia de tu eje posterior. La variación del ángulo de las palmas transforma el flujo energético: de la apertura receptiva (palmas arriba) a la anclaje y estabilidad terrenal (palmas abajo), completando así el circuito energético y muscular de la parte superior del cuerpo.
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